Un tribunal de Hong Kong convocará una audiencia el lunes 4 de diciembre de 2023 sobre los planes del problemático promotor inmobiliario chino Evergrande para reestructurar sus deudas de más de 300.000 millones de dólares.
El gigante inmobiliario fue acusado de inflar sus ingresos en los informes anuales de 2019 y 2020, en lo que podría ser uno de los mayores fraudes contables de la historia. Las sanciones por esta acción salpican a su fundador y a otros cinco directivos.
China Evergrande Group habría exagerado sus ingresos en más de 72.000 millones de euros (78.000 millones de dólares) dos años antes de su estrepitoso colapso de 2021 que generó ondas expansivas de las que todavía no se recupera la segunda economía del mundo.
Fue la Comisión Reguladora del Mercado de Valores (CSRC) del gigante asiático la que remitió el comunicado a las bolsas de China continental y multó a la empresa con 533 millones de euros (581 millones de dólares).
Su fundador, el desarrollador Hui Ka Yan, también fue sancionado con 6,5 millones de dólares y se le prohibió participar en los mercados financieros del país de por vida. Él ya había sido detenido por las autoridades en septiembre, por presuntos “delitos ilegales”.
Otros antiguos ejecutivos, Xia Haijun y Pan Darong, también fueron sancionados con multas y prohibiciones de mercado.
Junto con la advertencia a los mercados bursátiles chinos, incluidos Shanghai y Shenzhen, el documento señala las cantidades que la empresa habría falsificado.
La notificación muestra que Evergrande exageró sus ingresos en 2019 por unos 30.000 millones de dólares, mientras que en 2020 los habrían inflado en casi un 80% con unos 48.600 millones, una suma de 78.000 millones de dólares que jamás existió.
Luego de mostrar los informes fraudulentos, la empresa habría recaudado dinero en los mercados financieros basándose en las cifras falsificadas.
¿Cómo afecta el cierre de la empresa china Evergrande en la economía mundial?
El fundador de la empresa, quien en su momento de mayor éxito llegó a ser el segundo hombre más rico de toda Asia, ahora es señalado por los reguladores chinos de ser “el responsable directo y, al mismo tiempo, el controlador real de la organización y la orientación” del fraude. “Los medios eran especialmente atroces y las circunstancias especialmente graves”, apuntó la CSRC.
La historia de la caída de un gigante
Evergrande, que un día fue un emblema de éxito y ambición empresarial en China, siendo parte del sector que llegó a representar un tercio del crecimiento del país, es conocido hoy como el causante de la difícil situación inmobiliaria que incluso ha arrastrado a otras empresas también a la quiebra.
Uno de los grandes errores de la compañía fue tratar el dinero que recibía por apartamentos como ingresos netos, incluso aquellos que aún no se habían pagado. La empresa usaba la totalidad del dinero recibido para hacer más apartamentos y venderlos a otros ciudadanos, en un ejercicio cíclico que llevó a muchos clientes a darse cuenta de la burbuja demasiado tarde.